Microbiota y ansiedad
Ansiedad y Microbiota
Tal vez tú también te hayas encontrado en una situación en la que tu cuerpo ha activado todas las alarmas: el corazón se acelera, la respiración se vuelve más superficial y el estómago se revuelve. La ansiedad es un problema que cada vez recibe más atención, afectando a cerca del 10 % de la población mundial cada año (Simpson et al., 2020). Sin embargo, a menudo se le atribuye erróneamente a la ansiedad un origen exclusivamente mental, sin considerar que también pueden estar implicados mecanismos físicos. Este artículo busca ofrecer una comprensión básica de esta interacción.
La ansiedad, se ha relacionado con desequilibrios en la microbiota intestinal. El eje microbiota-intestino-cerebro es unsistema complejo y bidireccional en el que las bacterias no solo participan en la digestión, sino que también producen neurotransmisores y sustancias neuroactivas capaces de influir en el sistema nervioso central (Simpson et al., 2020). Así, alteraciones en la composición de este ecosistema pueden desencadenar respuestas que afectan directamente el estado emocional y la regulación del ánimo.
El estrés y la mala gestión de las emociones tienen un impacto profundo en este equilibrio (TR, 2022). La exposiciónconstante al estrés puede incrementar la permeabilidad intestinal, facilitando el paso de productos bacterianos como los lipopolisacáridos. Estos componentes, al transitar hacia el torrente sanguíneo, pueden originar procesos inflamatorios que, a través de la activación del eje hipotálamo-hipófisis-adrenal, contribuyen a la neuroinflamación yagravan los síntomas de ansiedad (Vista De Depresión, Ansiedad Y Microbiota Intestinal: Mecanismos Neurobiológicos | Acta Neurológica Colombiana, n.d.).
Estudios han identificado un patrón distintivo de disbiosis en individuos con ansiedad. Se ha observado un aumento en bacterias como Bilophila y Alistipes, y una disminución en otras como Anaerostipes y Dialister (TR, 2022). Esta alteración del equilibrio microbiano resulta en una inflamación intestinal que, a su vez, se traduce en un deterioro en la comunicación entre el intestino y el cerebro, estableciendo un vínculo directo entre la salud de la microbiota y el desarrollo de trastornos ansiosos.
Asimismo, la influencia de factores externos como la alimentación, el uso prolongado de antibióticos y las condiciones durante el desarrollo en la infancia se hacen evidentes en la configuración de este ecosistema. Una dieta inadecuada o intervenciones médicas mal calibradas pueden alterar la delicateza de la microbiota, aumentando el riesgo dedisbiosis y, por ende, la susceptibilidad a la ansiedad (TR, 2022).
Un hallazgo innovador en este campo es el descubrimiento de la bacteria Christensenella minuta. Patentada en 2020por un equipo de investigadores liderado por Yolanda Sanz en el IATA-CSIC, esta bacteria, hallada en intestinos saludables, ha demostrado su capacidad para modular el estado de ánimo. A través de la producción de serotonina, uno de los neurotransmisores asociados a la regulación emocional, Christensenella minuta ha mostrado potencial en la reducción de síntomas ansiosos y la atenuación del estrés en estudios experimentales (Csic, 2023).
Finalmente, el reconocimiento del papel esencial que desempeña el intestino – con su vasta concentración de células inmunitarias y neuronas – resalta la importancia de cuidar este microcosmos interno. La interconexión entre la microbiota y el cerebro abre nuevas perspectivas para comprender los mecanismos subyacentes de la ansiedad y plantea posibilidades innovadoras para su tratamiento. La investigación en este campo continúa abriendo caminos que podrían transformar el enfoque terapéutico de los trastornos emocionales, revelando que el bienestar mental y la salud intestinal están íntimamente ligados en una danza compleja y fascinante.
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Bibliografía:
Csic. (2023, March 27). La conexión entre el intestino y el cerebro puede proteger la salud mental. Consejo Superior De Investigaciones Científicas.
https://www.csic.es/es/actualidad-del-csic/la-conexion-entre-el-intestino-y-el-cerebro-puede- proteger-la-salud-mental
Simpson, C. A., Diaz-Arteche, C., Eliby, D., Schwartz, O. S., Simmons, J. G., & Cowan, C. S. (2020). The gut microbiota in anxiety and depression – A systematic review. Clinical Psychology Review, 83, 101943. https://doi.org/10.1016/j.cpr.2020.101943
TR, P. M. (2022, January 31). Doctora Olalla Otero: “En momentos de estrés o ansiedad la microbiota se altera porque entre cerebro e intestino la comunicación es bidireccional.” Revista Pharma Market.
https://www.phmk.es/entrevistas/doctora-olalla-otero-en-momentos-de-estres-o-ansiedad-la- microbiota-se-altera-porque-entre-cerebro-e-intestino-la-comunicacion-es-bidireccional
Vista de Depresión, ansiedad y microbiota intestinal: mecanismos neurobiológicos | Acta Neurológica Colombiana. (n.d.). https://www.actaneurologica.com/index.php/anc/article/view/1341/1661